METASEQUOIA BONSAI EXTERIOR

La Metasequoia es una planta primitiva, pertenece a la familia de coníferas, tiene un hermoso follaje de hojas verdes en forma de aguja que en otoño se vuelven de un color rojo amarillo brillante. Es un tipo de muy apreciado como bonsai porque es el cultivo es muy simple, no le teme al frio y puede ser mantenido al aire libre durante todo el año. Hasta el siglo pasado se pensaba que esta planta llevaba dos millones de años extinta, solo se conocía gracias al descubrimiento de sus fósiles. En los años 40 en una remota región de China, se encontraron gigantescos ejemplares, a partir de ese momento se inició el cultivo de esta magnífica planta, apodada Picea de agua.

La metasecuoya ama los lugares húmedos y pantanoso, crece vigorosamente hasta los 40 metros de altura, produciendo una enorme cantidad de hojas compuestas, de hasta 20 centímetros de largo.

Mientras pertenecía a la familia de cupresáceas, la Metasequoia es una pelar el árbol.

En el cultivo de bonsai, es de cultivo fácil dando una gran satisfacción, sin problemas de plagas y sin la necesidad de intervenciones especiales más allá de la cobertura normal de principios de verano.

CUIDADO

Elija para la Metasequoia un colocar en a pleno sol, esto permite obtener mechones de hojas compactos. Cuando el sol calienta en verano, dale algo de sombra para evitar que las hojas pierdan color. Cuando bajan las temperaturas, manténgalo en silencio al aire libre incluso en las áreas más frías, la Metasequoia no le teme a las heladas. Le encantan los suelos húmedos por lo tanto regarlo con frecuencia, especialmente durante el verano, cuando es bueno colocarlo a la sombra, pero recuerde evitar el estancamiento del agua. Durante el invierno, cuando las hojas hayan caído, verifique la humedad del suelo una vez a la semana y riegue si está completamente seco. Aliméntalo constantemente a lo largo de la temporada de crecimiento, de marzo a septiembre.