Estamos en pleno verano, se acaban los colegios, llegan los días de descanso y el tiempo para pasar juntos se hace más largo e intenso.

En esta temporada de las mil oportunidades, la naturaleza nos brinda todo lo necesario para escapar de la rutina y descubrir nuevas actividades para hacer con los niños.

"Mamá, ¿hacemos un dibujo juntos?"

"Papá, ¿pintamos con colores?

Las voces suplicantes resuenan en los hogares. Cómo no escucharlos. Entonces intenta por una vez dejar tempera y rotuladores en el cajón y usa los colores que nos regala la naturaleza junto a tus hijos.

Para los artistas mayores, existen técnicas reales para extraer el color triturando y tamizando verduras, pero existen métodos maravillosos que le permiten crear obras maestras utilizando hojas y frutas directamente.

Toma asiento alrededor de una mesa o acuéstate junto a una gran sábana común en el piso y equipado con papel y pinceles, comienza tu obra de arte.

ESPINACA VERDE

Estas hojas se encuentran entre las más ricas en clorofila que puedes encontrar, coge una de cada una y pásala un poco entre tus manos para que se vuelva más suave y flexible. Dóblalo en dos partes y comienza a pintar en tu hoja frotando la hoja de espinaca que liberará trazos de color verde brillante . También puedes colocar la hoja tumbada sobre el papel y con la parte inferior del pincel golpea la hoja, al levantarla encontrarás un cuadro digno de los mejores puntillistas de la historia.

AMARILLO AZAFRÁN

Un poquito de azafrán en polvo mezclado con un poco de agua es suficiente para obtener una acuarela de color intenso que podrás esparcir sobre la hoja con un pincel o directamente con los dedos.

Remolacha morada

Un tubérculo violeta intenso utilizado para colorear incluso los platos más finos es un productor de color perfecto para pintar. La remolacha se puede picar e introducir en un viejo trozo de tela que, presionado con un poco de fuerza, hará un goteo de líquido de color muy intenso que también podrás untar directamente con los dedos.

CAFÉ MARRÓN

Abre la puerta de tu cocina, saca una cucharadita de café en polvo del frasco o toma directamente un grano y úsalo como si fuera un lápiz . La intensidad de este color te llevará a imaginar nuevos mundos.

Sésamo negro, arándanos, cerezas rojas y cúrcuma naranja, cualquier cosa de origen vegetal que tengamos en la casa o en el balcón es una potencial herramienta de color o pintura.

Déjate llevar y sin una meta y un objetivo específico experimenta, colorea, pega, manipula las verduras, observa a tus hijos, en esto son los mejores maestros que podemos tener.

¡Que te diviertas!